Pensar y pensar y pensar de más y sobrepensarlo todo, hasta lo que me esfuerzo por no pensar. Cuando duermo, cuando como, cuando camino y cuando me lavo los dientes… pensar en exceso no es como se cree una maldición de genios, más bien después de pensarlo mucho creo que es todo lo contrario.
Alguien me decía que podía escuchar a mi mente pensando, me pregunto como se oía… tal vez nunca lo sepa. Hoy pienso que la mayor parte del tiempo se escucha como algo muy parecido a esto
un poco por la música y mucho más por el nombre de la canción
besos
Cuento de navidad
Hace 1 año